miércoles, 23 de julio de 2014

MALDAD

El silencio eres tú.
Pleno como lo oscuro,
incalculable 
como una gran llanura
desierta, desolada,
sin palmeras de música,
sin flores, sin palabras.
Para mi oído atento
eres noche profunda
sin auroras posibles.
No oiré la luz del día,
porque tu orgullo terco,
rubio y alto, lo impide.
El silencio eres tú:
cuerpo de piedra.

MANUEL ALTOLAGUIRRE