jueves, 17 de septiembre de 2009

Al menos 7 explosiones en Rangún en la víspera del recurso de Suu Kyi


Terra - Al menos siete explosiones fueron registradas hoy en una zona de Rangún, la antigua capital de Birmania, un día antes de que los abogados de la líder del movimiento demócrata, Aung San Suu Kyi, presenten los alegatos del recurso contra la condena a 18 meses de arresto.

La radio estatal birmana no informó de víctimas ni de daños materiales de consideración.

Las explosiones, cuyo origen la Policía investiga y no ha ofrecido detalles, tuvieron lugar en cadena al norte de la ciudad, donde están ubicados el barrio residencial en el que se encuentra la vivienda de Suu Kyi y un polígono industrial.

Por otro lado, los medios de comunicación birmanos, todos ellos controlados por la Junta Militar, defendieron hoy que no se permita a la opositora birmana de 64 años que asista mañana a la vista de su recurso.

El diario La Nueva Luz de Myanmar informó de que los tribunales de justicia son los que deciden si es necesaria la presencia del acusado o no en la sala según dispone la Ley.

La Nobel de la Paz en 1991 está defendida por un equipo de tres abogados que mañana argumentará que la condenada el 11 de agosto a 18 meses de arresto domiciliario se fundamentó en la Constitución de 1974, pese a que ésta fue revocada el año pasado.

El preámbulo de la Constitución aprobada en referéndum en 2008, redactada por el régimen militar, dice en el párrafo tercero que la anterior de 1974 dejó de estar vigente en 1988.

Además, el propio jefe de la Junta, el general Than Shwe, firmó el 29 de mayo de 2008 una orden que anula la Carta Magna de 1974.

Suu Kyi lleva 14 de los últimos 20 años confinada en su casa de Rangún por pedir de forma pacífica reformas democráticas en el país.

El pasado mayo, tres semanas antes de que venciera el plazo de seis años de su última condena, el estadounidense John Yettaw se introdujo en la casa de Suu Kyi para, según su testimonio, avisar a la activista birmana de que su vida corría peligro, porque había tenido una visión en ese sentido.

Las autoridades acusaron a Suu Kyi, de 64 años, de haber violado los términos del arresto domiciliario que cumplía desde 2003 por no haber denunciado la presencia del estadounidense.

Dos jueces militares sentenciaron en agosto a Yettaw a siete años de trabajos forzados y a Suu Kyi a tres años, aunque la condena fue conmutada por la de 18 meses de arresto domiciliario.

Yettaw fue entregado a Estados Unidos por razones humanitarias el pasado 16 de agosto.

Los militares que rigen Birmania desde la asonada de 1962 no acataron el resultado de las elecciones parlamentarias celebradas en 1990, cuando la LND, liderada por Suu Kyi, ganó con más del 82 por ciento de los votos.